7 consejos para mantener a tus hijos bien hidratados

Cuando hay tantas cosas que hacer, es fácil olvidarse de mantenerse hidratado. Según un estudio mundial realizado entre 8039 personas, menos de la mitad de los encuestados cree que sus hijos beben suficiente agua. Sin embargo, en el programa Healthy Starts for Families, los participantes afirman haber bebido más agua después de empezar el programa.

 

Una gran parte de la hidratación es la concienciación.

- ¿Cuánto bebes cada día?

- ¿Cómo se hidrata su familia cada día?

- ¿Es el agua la única forma de hidratarse?

 

¡Averigüémoslo!

 

Aquí hay 7 consejos para que mantenerse hidratado sea lo más importante para toda la familia.

 

1.         Cambia tu mentalidad

2.         Piensa más allá del agua

3.         Modele el comportamiento que desea

4.         Receta para niños a la hora de la merienda

5.         Haz un truco

6.         Pégalo

7.         Regar una planta

 

1.     Cambia tu mentalidad.

Los niños no piensan como nosotros los adultos. Nosotros tenemos mucha experiencia de vida, ellos no. No saben lo que es sentirse deshidratado y probablemente no podrían expresarlo verbalmente si lo sintieran.

 

Esto significa que hay que anticiparse a los buenos momentos para hidratarse y ofrecerles algo de beber varias veces al día. No es necesario que acepten cada vez, y si lo haces sin forzar ni presionar, puede que empiecen a aceptar beber más a menudo.

 

 

Estos son los momentos en los que ofrezco agua a mi hijo:

- Al despertarse

- Con el desayuno

- Con la merienda de la mañana

- Antes de la comida

- Con la comida

- Con una actividad física

- En el parque

- Después de llorar (el agua calma)

- Al lavarse los dientes

- A la hora de dormir (en la mesita de noche)

 

2.     Piensa más allá del agua.

La hidratación incluye todos los líquidos y va mucho más allá del agua. Añade algunos de estos alimentos y bebidas a tu combinación semanal para aumentar el líquido que ingieren tus hijos.

 

- Sopas de cualquier tipo.
- El gazpacho, que es una sopa fría de verduras.
- Guisos, como un estofado de carne o un goulash.
- Currys (por ejemplo, dahl con mucho líquido)
- Tés o infusiones de hierbas (fríos o calientes)
- Fruta fresca, como sandía, fresas, pepino y tomates.
- Ensaladas verdes como la lechuga de mantequilla y la iceberg.
- Batidos
- Cubitos de hielo con trozos de fruta en su interior.
- Leche y leches vegetales
- Yogur
- Agua de coco

3.     Modela el comportamiento que quieres

Nuestros hijos son mini-yo: toman como modelo a su persona favorita en la casa. Ahora mismo, mi hijo sigue las acciones de su padrastro, sus bromas sarcásticas y su actitud juguetona. A veces es estupendo, a veces no. Así que le recuerdo a mi marido que demuestre los buenos hábitos para que mi hijo los adquiera también. Cosas como:

 

- Beber agua durante todo el día

- Lavarse los dientes después de cada comida

- Coger un libro para leer en lugar de ver la televisión (¡esto es algo importante para mí ahora mismo!)

 

Las formas en que me gusta modelar la hidratación son:

 

- Llevar siempre mi adorable y bonita botella de agua cuando estoy de viaje

- Elegir agua en lugar de bebidas azucaradas cuando salgo a comer

- Preparar una sopa o un caldo y servirlo en la cena

- Comer ensaladas frescas con lechuga en el almuerzo... siempre, ¡incluso con un sándwich!

 

4.     Receta para niños a la hora de la merienda

No hay nada mejor que hacer que tu hijo se "apropie" de la tarea que debe aprender. Ponte a jugar en la cocina a la hora de la merienda y permíteles preparar las bebidas. Aquí tienes algunas recetas fáciles y divertidas.

 

Agua de limón

 

- El adulto llena una jarra grande de agua fría.

- Deja que el niño, con ayuda, exprima el zumo del limón.

- Viértelo en la jarra de agua.

- Deja que el niño eche los cubitos de hielo de uno en uno y luego remueve para mezclar.

- Si está demasiado agria, puede añadir un poco de jarabe de arce al gusto.

 

Agua de pepino y menta

 

- El adulto llena una jarra grande de agua fría.

- El adulto corta el pepino.

- Deja que el niño machaque el pepino con un machacador o una cuchara grande en un bol.

- Vierte el puré de pepino en la jarra de agua.

- Añade hojas de menta fresca.

- Deja que el niño eche los cubitos de hielo de uno en uno y luego remueve para mezclar.

- Que lo disfrutes.

 

5.     Con un truco

No hay nada mejor que una nueva "cosa" para hacer divertido un aburrido vaso de agua.

Truco 1) Una nueva botella de agua con una función de chorro.

Truco 2) Añade al agua polvo de té de flor de guisante mariposa. El polvo apenas tiene sabor, pero hace que el agua sea de color azul y púrpura.

Truco 3) Congela el agua en cubitos de hielo, añade un poco de zumo de frutas y haz un granizado con tu batidora.

 

6.     Pegatinas

A todo el mundo le gustan las pegatinas. Crea una tabla de pegatinas para cada miembro de la familia, incluso para el perro.
Si no eres mañoso, echa un vistazo a Esty para descargar una bonita por sólo unos pocos kilos.

- Por cada vaso de agua que se beba, añade una fabulosa pegatina.
- Al final de la semana... mira quién ha bebido más agua.
- ¿Quizás haya un premio para los mejores bebedores? ¿Una nueva botella de agua?

7.     Regar una planta

Se trata de enseñar una lección de vida. En primer lugar, ¿por qué necesitamos beber agua? Pues bien, observa esta planta y hazle a tu hijo estas preguntas.

- ¿Qué aspecto tiene cuando no recibe suficiente agua?

- ¿Cómo se ve después?

- ¿Qué crees que nos pasa a los humanos cuando no recibimos suficiente agua?

- ¿También nos caemos y nos cansamos?

 

 

 

Ahora que hemos compartido algunas de nuestras ideas favoritas, ¿cuál elegirás tú? ¿Cuál crees que sería la mejor para tus hijos?